El simple hecho de quedarse quieto es un gran desafío para algunos perros, especialmente para los cachorros jóvenes y con problemas de conducta hiperactiva
Para enseñar al perro a sentarse, y más adelante quedarse en esa posición, debes comenzar poco a poco hasta lograr que le resulte fácil hacerlo bien. Para un cachorro joven y enérgico, eso puede significar quedarse sentado y quieto por medio segundo nada más.
Eso está bien, desde la mitad de un segundo puedes ‘construir’ hasta un segundo, luego dos, y de ahí en adelante. Muchas estancias cortas y exitosas son mejores para las habilidades de obediencia de tu perro, comparado a una larga estancia que termina con un perro errante y un dueño frustrado.
Entrenar a un perro con el comando ‘sentarse’ es el primer ejercicio de entrenamiento que debes intentar y uno de los comandos más importantes que tu perro aprenderá.
Comienza estos sencillos pasos en un lugar que sea familiar para tu perro, sin distracciones tentadoras. Mantén a tu perro enfocado hacia ti al ponerte frente a él, mientras le prestas toda tu atención y le mantienes la mirada.
Si tu perro mantiene la posición por un segundo o dos, elógialo y dale una golosina como recompensa. Repite el proceso, esta vez haciendo que tu perro mantenga la posición durante unos segundos más, antes de darle la recompensa.
Una vez que tu perro responda de manera confiable, agrega la señal visual. Pídele a tu perro que se siente o se acueste, luego dile que se ‘quede’, mientras mantienes la mano extendida con la palma hacia la nariz de él, en la posición de ‘parada’.
Si mantiene la posición por un segundo o dos, elógialo y ofrece un regalo. Repite la secuencia, agrega gradualmente un segundo cada vez para pedirle una estadía más larga.
Cuando entienda completamente lo que se espera, presenta el gesto con la mano que tu perro aprenderá. Usa un gesto, como tu mano sostenida verticalmente frente a ti, que sea consistente entre todas las personas que entrenan o viven con tu perro.
Dile ‘siéntate’ mientras tu perro se sienta, para que aprenda a asociar la palabra con la acción. Ahora que has agregado la señal, con la práctica podrás pedirle que se siente sin tener que atraerlo a la posición con la golosina.
En el momento en el que tu perro rompa la estancia, dile “¡siéntate!» o «¡quédate¡» o «¡abajo!» , según la posición en la que estaba originalmente. Luego, vuelve a intentar una estancia más corta.
Si has estado practicando por un tiempo, y tu perro conoce el comando de permanecer, puedes hacer que tu voz sea grave, como una reprimenda, cuando se está moviendo de posición.
Pero no lo castigues. En el momento en que te pongas molesto con tu perro, ya habrás interrumpido la estancia, y el asociará el castigo con lo que estaba haciendo en el momento en que se le castigó.
Una vez que tu perro haya aprendido el comando de ‘permanecer’, puedes hacerlo lentamente más desafiante. Ponte a un pie de distancia de tu perro cuando le pidas que se quede, luego a dos pies y sigue aumentando la distancia.
Pídele que se quede cuando le des la espalda: cuando hay otra persona o perro en los alrededores, y luego cuando estos actores estén bastante cerca. Después, cuando estés rebotando una pelota y, por último, cuando haya bolitas de pienso dispersas a su alrededor.
Agrega un nuevo desafío solo si tu perro responde de manera confiable. Si tu perro alguna vez rompe una estancia, elimina un desafío, acorta el tiempo, elimina las distracciones o ponte más cerca de él e inténtalo nuevamente. La paciencia y la constancia serán claves para enseñar al perro correctamente.
Fundación Vidanimal es una organización no gubernamental sin fines de lucro abocada a difundir, proteger y promover los derechos de los animales.
Los perros funcionan bajo el sistema de recompensa. Aunque ya he conocido casos en que los perros simplemente les encanta obedecer las ordenes.